Con el objetivo de evaluar los beneficios de una intervención de arteterapia para los pacientes con cáncer de una Unidad de Cuidados Paliativos de un hospital universitario, el presente trabajo de tesis doctoral se planteó la hipótesis general de que sería acogida con satisfacción, mejoraría su calidad de vida, en particular en las dimensiones emocional y espiritual y ayudaría al control de síntomas. Se realizaron dos estudios. El primero, prospectivo de metodología cuantitativa pre-post data utilizó las escalas ESAS y STAS para la evaluación de síntomas, las escalas ECP y Mac Gill de la calidad de vida y cuestionarios semi-estructurados dirigidos al paciente, al familiar y al equipo interdisciplinar para recoger sus opiniones sobre la percepción de la intervención. El segundo estudio se inició con un estudio pormenorizado de casos clínicos, basados en el proceso arteterapéutico y la producción plástica de los pacientes. Prosiguió con una integración de la experiencia de casos, como un estudio piloto inductivo de metodología cualitativa etnográfico-interpretativa, utilizando entrevistas en profundidad a pacientes, familiares y equipo paliativo, de cara a un análisis, mediante codificación, de sus discursos transcritos verbatim, para extraer de ellos líneas explicativas sobre el modo de acción de la intervención y sus efectos. Los resultados del primer estudio mostraron que la intervención de arteterapia, sumada a la intervención estándar de cuidados paliativos, produjo una reducción significativa de síntomas, así como una mejora significativa de calidad de vida. Las respuestas a los cuestionarios específicos de arteterapia evidenciaron la incidencia particular de la intervención en estos resultados globales. La sensación de encontrarse mejor después de las sesiones arteterapéuticas fue confirmada por el 78,4% de los pacientes, los cuales afirmaron en un 74,5% que les gustaba “bastante”o “mucho”. Al 97,4% de los familiares les agradó que se realizara este tipo de actividad con su ser querido enfermo y en el 92% de los casos evaluados, el equipo consideró que la intervención de arteterapia pudo representar alguna forma de ayuda. Después de los dos estudios, los beneficios identificados por pacientes, familiares y profesionales se relacionaron con un alivio emocional en término de mayor tranquilidad ante la situación, una estimulación de sensaciones agradables en cuanto al disfrute con la creación artística y la relajación, una concentración sobre un foco de atención que aportó a la vez distracción, emergencia de recuerdos y alivio del dolor, una mejora de las relaciones interpersonales a raiz de los intercambios que proporcionó el trabajo arteterapéutico y una posibilidad de adaptarse mejor a la enfermedad e incluso de llegar a la aceptación. El proceso específico de creación artística en presencia del arteterapeuta y, en particular, la interpretación de los contenidos simbólicos representados en sus trabajos ayudaron a los pacientes a buscar y construir el sentido personal que puede tener para ellos la difícil experiencia del final de la vida, incidiendo a su vez en las vivencias de los familiares y en las percepciones de los profesionales durante esta etapa.