INTRODUCCIÓN: pese a que el tratamiento habitual para la corrección quirúrgica de la miopía consiste en la fotoablación corneal con láser excímer, determinadas circunstancias como un espesor corneal insuficiente, astigmatismos irregulares, disminución de la calidad de visión, conducen a una indicación de cirugía mediante el implante de lentes intraoculares fáquicas. La conservación de la capacidad de acomodación hace que este tipo de lentes sea la única alternativa aceptable para la corrección de la gran mayoría de las altas ametropías en el paciente joven. La lente implantable de colámero (ICL) es una lente fáquica de cámara posterior ideada para la corrección de defectos refractivos elevados. JUSTIFICACIÓN E HIPÓTESIS DE TRABAJO: La eficacia, seguridad, predictibilidad refractivas, la biocompatibilidad y la tolerancia a medio y corto plazo de la lente ICL han sido demostradas. La edad al implante ICL suele estar entre 25 y 45 años por lo que resulta esencial determinar a muy largo plazo: la evolución de estos parámetros, la estabilidad de los resultados refractivos y la seguridad en lo referente a aparición de complicaciones. Se pretende contrastar si la lente de colámero implantable (ICLTM): es una lente segura, eficaz y predecible para la corrección quirúrgica de la alta miopía, si los resultados refractivos obtenidos tras su implante son estables a largo plazo y los niveles de seguridad a nivel morfológico y funcional adecuados. OBJETIVOS: Analizar los resultados funcionales obtenidos con la lente fáquica ICL para la corrección de la alta miopía en lo que se refiere a seguridad, eficacia y predictibilidad refractiva. Evaluar la estabilidad de los resultados visuales y refractivos a largo plazo, 12 años tras el implante. Calcular las complicaciones relacionadas con el implante a corto, medio y largo plazo (12 años tras la intervención). Analizar la evolución a largo plazo de la densidad celular endotelial y el abovedamiento de la lente intraocular como parámetros morfológicos de seguridad esenciales tras el implante de la lente fáquica ICL para la corrección de la alta miopía. MATERIAL Y MÉTODOS: Estudio retrospectivo, observacional de seguimiento a largo plazo. Datos clínicos de pacientes miopes altos (144 casos) intervenidos de forma consecutiva mediante implante de lente fáquica ICL con un seguimiento ≥ 12 años. Los criterios de inclusión fueron los habituales para la cirugía de implante de lentes fáquicas. A todos los pacientes (n=144) se les realizó una exploración oftalmológica completa preoperatoria que incluyó: examen visual (agudeza visual sin corrección –AVSC-, con corrección –AVCC- y mejor agudeza visual corregida –MAVC-, biomicroscopía, medición de la presión intraocular y exploración del fondo de ojo, contaje endotelial y medición de la profundidad de cámara anterior. Los controles se efectuaron al día siguiente, 1º, 3º, 6º mes y a los 1, 2, 4, 8, 10 y 12 años de las intervenciones. Se estudiaron: Agudezas visuales: AVSC, AVCC, MAVC, Refracción (equivalente esférico y cilindro refractivo), índice de eficacia, predictibilidad, índice de seguridad, cálculo de los cambios experimentados en el astigmatismo, estudio de la población celular endotelial, estudio de otras variables morfológicas: Vaulting. RESULTADOS: Se mostró una gran estabilidad refractiva a lo largo de todo el seguimiento. Durante todo el estudio el índice de seguridad fue superior a 1. La AVSC sufrió un lento descenso hasta los 12 años. La pérdida celular endotelial acumulada al final del estudio fue de 19.7%. De entre las complicaciones registradas, destacan las cataratas (13.88%). No se observaron cambios significativos en la distancia entre la superficie posterior de la lente y la superficie anterior del cristalino entre aquellos pacientes que desarrollaron cataratas y los que no. CONCLUSIONES: La cirugía consistente en el implante de la lente intraocular fáquica ICL para la corrección quirúrgica de la alta miopía alcanza unos niveles satisfactorios en lo que se refiere a seguridad, eficacia y predictibilidad refractivas. El defecto miópico corregido mediante el implante de lentes intraoculares fáquicas ICL no sufre variaciones relevantes en el periodo de tiempo que abarca doce años después de su implante. Las complicaciones relacionadas con los implantes acontecidas a corto, medio y largo plazo son escasas en número. La integridad de la población celular endotelial es superior al encontrado al insertar otros modelos de lente. La progresiva reducción en el abovedamiento de la lente sobre el cristalino no implica una mayor facogenicidad a largo plazo.