Se realiza una evaluación espacio-temporal de las precipitaciones (anuales, tandas máximas de varios días de duración y máximas en 24 h) que preceden y acompañan a movimientos de ladera en un ambiente típicamente mediterráneo. A partir de casos observados (LA ROCA 1991b) se distinguen dos tipos de precipitación (volumen, intensidad, duración), que, a grandes rasgos, van asociados a diferentes morfogénesis por movimientos de ladera: a) tandas de lluvias muy intensas (> 200 mm), tras una prolongada y / o intensa sequía, responsable de la apertura de profundas grietas de retracción, asociadas a movimientos superficiales localizados. b) tandas menos intensas (< 200 mm), tras años excepcionalmente húmedos (> 1000 mm), acompañadas de movimientos superficiales generalizados y movimientos profundos. Se cartografía la distribución regional de tales lluvias para diferentes periodos de recurrencia (método Gumbel) y se estudia su frecuencia teórica y su distribución anual. Los mapas de lluvias muestran diferencias según el tipo de precipitaciones considerado. Las máximas en 24 h crean núcleos máximos junto al litoral, tanto más pegados a la costa cuánto mayor es el periodo de recurrencia contemplado; los núcleos máximos de las tandas se trasladan al interior de los conjuntos montañosos para todos los periodos de recurrencia y los picos máximos de los totales anuales presentan una posición intermedia. La disposición del relieve con respecto al 'temporal de Llevant', principal desencadenante de lluvias seguidas de movimientos de ladera, individualizan en los valles de Alcoi, un sector septentrional más húmedo y con tandas más intensas. Los valles abiertos al W, protegidos de los 'Llevants' deben la mayor parte de sus tandas importantes a la circulación atlántica