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La imagen del hombre 'salvaje' ha tenido una importancia excepcional en la constitución del discurso antropológico, tanto en su vertiente físicobiológica como en su dimensión sociocultural y filosófica. En efecto, se le ha concebido d~rante milenios como si fuese un monstruo, un prodigio natural de dimensiones colosales y de anomalías corporales típicas, por ejemplo, de la posesión de un único ojo en la mitad de la frente, como les sucedía, según la leyenda, a los cíclopes como Polifemo. Su conducta también estaba caracterizada por carencias antagónicas de lo que se suponía que era la genuina cultura o civilización, a saber, el desconocimiento de la vivienda, de la navegación, la agricultura, el culto a los dioses, las asambleas, la pública administración de justicia y la hospitalidad. El resultado de tales anormalidades solía ser la vida en la selva y la práctica bestial de la antropofagia. En este ensayo se especifica la construcción de esta tipología antropológica en la Odisea de Homero, la cual ha tenido una incidencia imposible de exagerar en toda la historia de Occidente, y se analizan los principales supuestos y contradicciones en los que se cae al usar ese apelativo tan discriminativo de 'salvaje', aplicándolo inconscientemente a los seres humanos. El estudioso del biologicismo racista . encuentra aquí una de las fuentes principales que en los contactos interculturales han lacrado las relaciones entre los grupos humanos. The image of the 'savage' man has had an exceptional importance in the development of the anthropological discourse, both within its physicobiological sphere as well as in its sociocultural and philosophical dimension. Indeed, for several millenniums, the 'savage' has been conceived as a monster, a natural prodigy of colossal size and typical body abnormalities like, for instance, a single eye in the middle of the forehead, as happened, according to the legend, with Cyclops such as Polyphemus. Furthermore, characteristics of their behavior included the lack of features considered inherent to true culture or civilization, namely housing, sailing, agriculture, worship of the gods, assemblies, public administration of justice, and hospitality. Such anomalies usually led to life in the jungle and the beastly practice of anthropophagy. This essay specifies the elaboration of such anthropological typology in Homer's Odyssey, whose incidence on the history of the West cannot be overemphasized. We analyze the main assumptions and contradictions incurred by using this discriminatory epithet and applying it carelessly to human beings. Those who study racist biologism may find here an outstanding example of intercultural contacts that have become a source for flaws in the relations among human groups.
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