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Leonardo Da Vinci solía decir que: “La nariz está ahí para manifestar el carácter del rostro”. Y ya en el s. XX, Jack Sheen afirmó con rotundidad: “La Rinoplastia es una operación tremendamente difícil aunque técnicamente resulte decepcionantemente fácil”. La Rinoplastia es una de las operaciones más frecuentes en Cirugía Plástica, es la más difícil, creativa, artística, estudiada, debatida, controvertida, apasionante y siempre fascinante. Y la parte más difícil de abordar con éxito en una rinoplastia es la Punta.
Presentamos una Nueva Técnica de Remodelación de la Punta Nasal en Rinoplastia, para Casos Extremadamente Difíciles, Mediante la Resección Total de los Cartílagos Alares y Fascia Temporal. Y lo hacemos desde la serena perspectiva y seguridad que nos proporcionan 29 años de trabajo con la técnica y una larga casuística de más de 700 casos operados.
HIPÓTESIS DE TRABAJO.
En la Cirugía Plástica de la punta nasal es posible resecar en su totalidad los cartílagos alares en determinados casos especialmente difíciles sin complicaciones siempre que tengamos en cuenta que la vía respiratoria nasal es correcta.
OBJETIVOS.
1. Demostrar que la técnica que empleamos es mucho más sencilla y menos traumática que aquellas técnicas tradicionales consistentes en la reconstrucción del vértice nasal con complejas estructuras cartilaginosas.
2. Comprobar que la resección total de los cartílagos alares es posible con ausencia de secuelas funcionales respiratorias siempre que corrijamos previamente, en su caso, cualquier elemento obstructivo endonasal (válvulas internas, cornetes y/o septum).
3. Tratar de alcanzar una base nasal equilátera y estable introduciendo, para ello, los recursos técnicos necesarios para evitar el colapso nasal en la inspiración.
PACIENTES Y MÉTODO.
Presentamos una larga casuística de más de 700 casos y una experiencia de 29 años (desde 1987).
Actuamos siempre mediante el abordaje quirúrgico de Rethi con el objetivo de alcanzar una base nasal equilátera, sólida y estable.
Y según la patología del vértice, y las características de la resección-reconstrucción, establecimos cinco grupos a los que llamamos Tipos: Tipo I, Tipo II, Tipo III, Tipo IV y Tipo V.
RESULTADOS.
Por la edad, nuestros pacientes presentaron una Edad Media de 28,5 ± 10,0 años y una Edad Mediana de 26 años, predominando el grupo comprendido entre los 21 y 45 años.
Por el género, fue mayoritario el grupo Femenino con un 82%.
Por el grado de corrección de la base nasal, el valor medio fue de 96,78 ± 8,47%, y el valor mediano del 100%.
El grado de satisfacción a los tres meses obtuvo un valor medio de 8,99 ± 1,21, y un valor mediano de 9. Al año, el valor medio fue de 9,55 ± 0,78, y un valor mediano de 10.
Las variables analizadas fueron: Edad, Género, Tipo de Rinoplastia, Indicación de la Rinoplastia, Tipo de Anestesia, Tipo de Intervención Quirúrgica, Rango Social, Rango Académico, Actividad Laboral, Estado Civil, Ventilación Nasal y Cirugía Endonasal previa.
Por el grado de corrección de los ángulos de la base nasal, la distribución siempre fue simétrica y platicúrtica. Y por el grado de satisfacción a los tres meses fue asimétrica mesocúrtica pasando a asimétrica leptocúrtica al año.
CONCLUSIONES.
El presente estudio nos ha permitido alcanzar las siguientes conclusiones:
1. La Nueva Técnica empleada nos permite conseguir un vértice nasal firme y estético a la vez que suave a la vista y al tacto por el efecto de la fascia temporal y la ausencia de injertos cartilaginosos.
2. Es una técnica poco traumática en comparación con las reconstrucciones tradicionales.
3. La base nasal equilátera y estable unido a la corrección de cualquier elemento obstructivo endonasal evita el colapso alar.
4. El grado de satisfacción de nuestros pacientes fue de 9, en una escala analógica visual, a los tres meses de la intervención, y de 10 al año.
5. La incidencia de complicaciones y secuelas con nuestra técnica ha sido muy baja, no rebasando la tasa del 1%.
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