|
El tejido productivo de la economía española está realizando cambios positivos en varias direcciones, pero sus progresos se ven obstaculizados por la desfavorable coyuntura macroeconómica, el fuerte ritmo de ajustes fiscales impuesto por la Unión Europea (UE) y la prolongación de las dificultades financieras.
Los datos del Informe muestran que el contexto macroeconómico no es favorable para aumentar la velocidad de los cambios que están produciéndose y hace que predominen los balances negativos en términos de actividad, empleo o endeudamiento. La falta de margen de maniobra financiero y de estímulos externos en el entorno europeo está manteniendo una fuerte presión sobre las empresas y el sector público, necesitados de recuperar la confianza de los mercados financieros para normalizar su situación. En ese sentido, 2012 ha sido un año de fuertes tensiones pero, paulatinamente, en el exterior se va abriendo camino el reconocimiento de que España está adoptando muchas decisiones importantes para corregir sus desequilibrios, que podrían dar resultados más pronto si el contexto europeo fuera más favorable. Para avanzar en esa dirección, el Informe de la Fundación BBVA propone 15 actuaciones que deberían incluirse en la agenda más inmediata aunque algunos de sus efectos sean a largo plazo.
|