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Las enfermedades orales como la caries se encuentran entre las más prevalentes en todo el mundo y se desarrollan como consecuencia de una disbiosis microbiana. Probablemente por esta naturaleza polimicrobiana y altamente variable, las aproximaciones de inmunización no son efectivas, y el uso de pre y probióticos que restablezcan la homeostasis han sido propuestas como alternativas prometedoras.
Durante años se han probado varias cepas bacterianas como posibles organismos promotores de la salud oral, pero generalmente son especies aisladas de nichos distintos al sitio donde deben ejercer su acción probiótica final, típicamente de muestras fecales. Nuestra hipótesis defiende que los comensales orales asociados a condiciones de salud serán más efectivos que las especies probióticas tradicionales asociadas a intestino, en un aspecto tan clave como la colonización del nicho dental. Además, el usar cepas propias de la cavidad oral ayudaría a solventar problemas prácticos, como la seguridad, la toxicidad de las cepas y el establecimiento de las dosis adecuadas para su administración.
En la presente tesis, se han realizado estudios genómicos, taxonómicos y bioquímicos en dos cepas de estreptococos aisladas de placa dental en individuos sin antecedentes de caries dental. Mediante análisis de los genes 16S, 23S y sodA y los valores de Identidad Nucleotídica Promedio (ANI), se demostró que estas cepas pertenecían al grupo mitis, pero ambas se agrupaban en una nueva rama filogenética, proponiendo para estos aislados el nombre de Streptococcus dentisani sp. nov. La especie propuesta es detectada en el 98% de las muestras de placa dental de individuos sanos en niveles de 10^8 bacterias totales en placa supragingival y, tras experimentos in vivo e in vitro en las cepas 7746 y 7747, se pudo comprobar que no produce ningún metabolito secundario tóxico, no presenta genes de virulencia ni presencia de elementos móviles en su genoma, no sobreviven a una digestión estomacal en simulador in vitro, y experimentalmente no presentan resistencia frente a los antibióticos comúnmente usados en clínica, lo que evita posibles efectos secundarios.
Además, pudimos demostrar que esta especie tiene una doble acción beneficiosa, ya que inhibe el crecimiento de los principales patógenos orales a través de la producción de al menos seis bacteriocinas, y también amortigua el pH ácido (la causa principal de la caries dental) a través de la vía arginolítica, que activa en presencia de arginina y en condiciones de pH ácido para producir amonio. Por todo ello, proponemos el uso de S. dentisani como un probiótico prometedor para la mejora de la salud bucodental, cuya eficacia deberá probarse en ensayos clínicos en seres humanos.
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