|
El primer Consell socialista de Joan Lerma se formaría el 28 junio 1983. El 27 julio 1985 se producía la primera remodelación. Acabado el acto de investidura, el presidente Joan Lerma nombró su primer Consell. Cesó a los miembros del Consell provenientes de la UCD, y mantuvo en el primer Consell autonómico a los consellers del Gobierno preautonómico de concentración anterior: a Felipe Guardiola Sellés, vicepresidente y conseller de Gobernación; Ciprià Císcar Casabán, Cultura, Educación y Ciencia; y Segundo Bru Parra, Industria, Comercio y Turismo. Incorporó en la conselleria de Presidencia a Rafael Blasco Castany; Antonio Birlanga Casanova en Economía y Hacienda; Miguel A. Millana Sansaturio en Sanidad, Seguridad Social y Trabajo; Vicente Llombart Rosa en Obras Públicas, Urbanismo y Transporte; y a Luis Font de Mora Montesinos en Agricultura, Pesca y Alimentación. Sería el Consell más político de los que tendría Joan Lerma, con tres políticos claves en el momento: Guardiola, Císcar y Blasco.
El primer cambio de Gobierno (28 julio 1985) supuso la desaparición de la vicepresidencia, y Joan Lerma nunca crearía otra vicepresidencia en las tres legislaturas de su gobierno. Ni Felipe González ni Joan Lerma tenían experiencia en realizar crisis de gobierno. Los dos tuvieron su primera experiencia en julio de 1985. Primera lección: no la anuncies, hazla.
El 4 de julio de 1985, Joan Lerma anunciaba crisis del Consell. Durante tres semanas, será el tema central de la prensa: porqué la hace, quien entra/sale, etc. Y todos a opinar. ¿Por qué la crisis? Desde el fin del IV congreso del PSPV de Alicante hasta antes del anuncio de crisis, la prensa transmitía el estado de ánimo de una parte de los socialistas valencianos, ya que el congreso había dejado al partido en una situación de división entre las partes en conflicto. Los congresos comarcales del partido, tras el congreso regional, habían debilitado al secretario general Joan Lerma, haciéndole perder la mayoría con que había contado hasta entonces en el Comité Nacional. Ninguna de las partes tenía la mayoría. Hacían falta pactos.
El presidente Lerma justifica la crisis para adaptar el gobierno a la nueva situación que se dará una vez cerrado el proceso de transferencias que se está cerrando, y que tiene previsto firmar en pocos meses. Y "reconoce públicamente por primera vez que «no estoy plenamente satisfecho» de la gestión de su gobierno durante los dos años transcurridos". No decía en que, ni quiénes.
El cambio de Gobierno de 28 de julio de 1985 vendría marcado por la desaparición de la única vicepresidencia del Consell y de su titular, Felipe Guardiola Sellés, que había participado en un intento de alternativa a la ejecutiva socialista que lideraba Joan Lerma en el IV congreso del PSPV-PSOE de Alicante (1985), con lo que el único conseller de Castellón desaparecía, y con él pasaba a segundo plano uno de los protagonistas de la Transición valenciana, diputado al Congreso en 1979 y 1982 como cabeza de lista por Castellón, uno de los cinco redactores del Estatuto de Autonomía -el otro socialista fue Joan Lerma-, político hábil y destacado, y miembro de la dirección socialista desde 1979.
Cambiaba de Conselleria Rafael Blasco Castany –de Presidencia pasaba a Obras Públicas, Urbanismo y Transporte-, que había mantenido una posición ambigua en sus apoyos, en espera de ver como se desarrollaba el congreso del PSPV-PSOE, y como quedaba Joan Lerma, si bien a este lo mantendría, ya que su hermano Francisco era alcalde de Alzira, vicepresidente 1º de la Diputación de Valencia y secretario general de la Ribera Alta, la más numerosa de militancia del partido. Y su otro hermano Jordi, secretario general de la Conselleria de Hacienda. Saldrían del Consell Vicente Llombart Rosa y Miguel A. Millana. Entraban Joaquín Colomer Sala, catedrático de Medicina y ex rector de la Universidad de Valencia, Vicent Soler Marco y Miguel Domenech Pastor. Tanto lo salientes como los entrantes carecían de peso orgánico en el partido, o no tenían ninguno, y su presencia era más técnica que política.
|