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Introducción y Objetivos
El ictus isquémico es un problema sanitario de primer orden que tiene una elevada prevalencia en la población y que es causa frecuente de muerte y discapacidad. El principal objetivo del tratamiento del ictus isquémico por oclusión de gran vaso en la fase aguda es recanalizar el vaso ocluido procurando una reperfusión precoz del tejido isquémico, siendo el tratamiento endovascular mediante trombectomía mecánica la técnica más efectiva de las actualmente implantadas en práctica clínica. Los objetivos principales de este estudio son analizar la efectividad y seguridad de esta técnica en nuestro medio e identificar marcadores pronósticos de evolución de los pacientes sometidos a dicho tratamiento.
Material y Métodos
Se diseña un estudio observacional con registro prospectivo de casos consecutivos de pacientes atendidos en nuestro centro con ictus isquémico agudo secundario a oclusión de gran vaso sometidos a trombectomía mecánica.
Se realiza una caracterización etiológica de los pacientes. Se evalúa la influencia de factores demográficos, clínicos y radiológicos en el estado clínico precoz medido por la escala NIHSS, en el pronóstico funcional a 90 días medido con la escala mRS, en la frecuencia de transformación hemorrágica sintomática y no sintomática y en la mortalidad al alta y a 90 días.
Resultados
Se presenta el análisis descriptivo y de caracterización etiológica de la muestra, que incluye un total de 356 pacientes. Se presentan resultados de los análisis de efectividad, de seguridad y de pronóstico funcional del subgrupo de pacientes con ictus isquémico por oclusión de gran vaso intracraneal de circulación anterior (N:312). Se obtiene una buena recanalización (TICI 2b-3) en el 78,8% de pacientes, un porcentaje de independencia funcional a 90 días del 43,1% y de transformaciones hemorrágicas sintomáticas del 5,4%. La mortalidad a 90 días fue del 20,8%. Una buena recanalización se asoció a una mejor evolución clínica precoz, a un mayor porcentaje de independencia funcional a 90 días y a una reducción de la mortalidad a 90 días sin incremento de las complicaciones hemorrágicas globales, hemorrágicas radiológicamente graves o hemorrágicas con deterioro clínico. La buena colateralidad leptomeníngea tuvo un efecto favorable significativo sobre la evolución de la gravedad clínica y sobre el estado funcional a 90 días, de potencia similar a la que aporta una buena recanalización del vaso ocluido.
Conclusiones
El tratamiento endovascular del ictus isquémico agudo por oclusión de gran vaso intracraneal es eficaz y seguro en nuestro medio. La recanalización eficaz se asocia a una mejor evolución clínica precoz, a un mejor estado funcional a 90 días y a una menor mortalidad. La buena colateralidad leptomeníngea tiene en nuestra serie un efecto favorable sobre la gravedad clínica precoz y sobre el estado funcional a 90 días similar al que aporta una recanalización eficaz.
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