|
Introducción: Las alteraciones en la función urinaria y sexual son complicaciones conocidas de la cirugía del cáncer de recto, incluso cuando se realiza una correcta resección rectal. El aumento de la esperanza de vida en estos pacientes ha visibilizado aspectos funcionales que conllevan un impacto en la calidad de vida postoperatoria.
Objetivos: El objetivo del estudio fue analizar de forma prospectiva la evolución de la función urogenital en pacientes intervenidos de cáncer de recto e identificar aquellos factores de riesgo que pueden tener un impacto en el deterioro de la función postoperatoria.
Materia y métodos: Estudio prospectivo de la evaluación de la función urinaria y sexual tras la cirugía del cáncer de recto mediante la cumplimentación del Índice Internacional de Síntomas Prostáticos (IPSS), el Índice Internacional de Función Eréctil (IIEF) y el Índice de Función Sexual Femenina (FSFI), preoperatoriamente, a los 6 meses y al año de la cirugía. Los factores predictivos de empeoramiento se identificaron mediante análisis uni y multivariante.
Resultados: Se incluyeron 101 pacientes (56 hombres y 45 mujeres), con una edad media de 66,36 ± 11,47 años. El valor medio del IPSS preoperatorio fue 7,96 ± 7,59, a los 6 meses 9,01 ± 6,81 y a los 12 meses 8,63 ± 5,59, sin diferencias estadísticamente significativas. La tasa de disfunción urinaria preoperatoria fue del 39% y a los 12 meses se produjo un deterioro en 23 pacientes (26,4%). El análisis de variables mostró únicamente un empeoramiento significativo de la nicturia (p = 0,037) en las mujeres. El riesgo ASA (OR: 11; [IC 95% 2,4-53]; p = 0,01), la dificultad quirúrgica (OR: 4,5; [IC 95% 1-19]; p = 0,027) y la fuga anastomótica (OR: 14; [ IC 95% 1,6-117]; p = 0,01), se identificaron como factores de riesgo independientes de empeoramiento de la función urinaria. En los hombres, el IIEF mostró alteraciones significativas a los 6 meses en la función eréctil, satisfacción de las relaciones sexuales y función sexual global, con recuperación al año. El alto porcentaje de pacientes con disfunción eréctil preoperatoria (64,5%) empeoró a los 6 meses (87,1%; p = 0,022) y se registró en el 72% al año de la cirugía. En relación con la gravedad, se identificó una tasa de disfunción moderada-grave preoperatoria del 22%, que se incrementó al 58% a los 6 meses (p = 0,009) y al 44% al año (p <0,0001). La quimiorradioterapia neoadyuvante (OR: 5,4; [IC del 95%: 0,9- 29,6]; p = 0,041) y el empeoramiento de la función eréctil a los 6 meses (OR: 20; [IC del 95%: 1,6-238]; p = 0,004) fueron factores independientes de deterioro a los 6 y 12 meses respectivamente. En las mujeres, el análisis del FSFI no demostró ningún empeoramiento significativo, aunque sí una mejora en la lubricación y el orgasmo.
23
Conclusiones: Nuestro estudio mostró una alta tasa de disfunción urogenital preoperatoria. No identificamos cambios significativos globales en la evolución urinaria postoperatoria, aunque registramos un empeoramiento al año en uno de cada cuatro pacientes. El riesgo ASA, la dificultad quirúrgica y la fuga anastomótica fueron factores predictores de deterioro. En los hombres, el empeoramiento temporal de la función eréctil fue común a los 6 meses de la cirugía y la quimiorradioterapia el único factor predictivo. Los pacientes que permanecían con disfunción mostraron un aumento en la gravedad de los síntomas en relación con el período preoperatorio. En la mujer no detectamos deterioro de la función sexual.
Palabras clave: cáncer de recto, función urinaria, función sexual, disfunción vesical, disfunción eréctil, fuga anastomótica, neoadyuvancia.
|