La organización de la vida política Suiza produce fascinación y admiración por su peculiaridad, singularidad y originalidad a nivel mundial. No en vano, cada año más de la mitad de las votaciones populares de todo el planeta se desarrollan en Suiza; se considera una «democracia consensual» además. Con lo cual es claramente el país más representativo para realizar un análisis en detalle de su sistema político representativo y el nivel de participación ciudadana que se logra. El lugar de nacimiento de Rousseau, ginebrino ilustre, dispone de unas características que la hacen única y le confieren unas peculiaridades y señas de identidad definitivas: grado de participación ciudadana en todos los ámbitos políticos, carácter de neutralidad e independencia de ciertas organizaciones supranacionales, centralidad europea, régimen financiero y fiscal, organización del sistema bancario, cantones (que son los centros de gravedad del Estado y conforman una especie de mercado común), contexto multicultural y plurilingüe, diversidad religiosa, así como su población y extensión.