Los dibujos del arquitecto Ximo Sanchis (1946) son una parte relevante de su visión de la arquitectura complementaria a sus proyectos y obras. Estas dos vertientes, dibujo y arquitectura, confluyen en una interpretación del territorio del País Valenciano que es significativa de los cambios que ha experimentado durante las últimas décadas. Una reflexión que se despliega en diferentes niveles. Por un lado, la imagen antrópica como síntesis de las construcciones ligadas al cultivo de regadío se complementa con las perspectivas de los terrenos de secano y los huertos de palmeras como rasgos históricos relevantes de este paisaje. Por otro, el panorama de la costa, invadida por los usos vacacionales y turísticos, recoge las huellas que estas actividades dejan sobre los tejidos urbanos tradicionales. Por último, la impronta experimentada por la renovación drástica de las ciudades completa la imagen del territorio valenciano que nos aporta el arquitecto.