Esta tesis quiere profundizar en cómo las instituciones participan en la configuración y la transmisión cultural de determinadas feminidades y masculinidades. Para ello se describen las prácticas pedagógicas de las matronas de atención primaria en el contexto del Programa de Educación Maternal a través de la metodología propuesta por Basil Bernstein, con la finalidad de esbozar los regímenes de género que son producidos y reproducidos en aquellos contextos. El marco teórico de esta tesis está vertebrado por 4 coordenadas de análisis fundamentales. Por una lado una teoría de poder y género que se nutre de las aportaciones de la socióloga Raewyn Connell y que, a través de su conceptualización analítica sobre los ordenes y regímenes de género, me ha permitido profundizar de lleno en esa bisagra en la que las organizaciones, formas estructurales de las instituciones y del sistema institucional mayor que es el Estado, participan en la transmisión cultural de unas estructuras de relaciones de poder genéricas. La institución sanitaria, y concretamente los servicios de atención primaria al embarazo, parto y puerperio, son entendidos en este trabajo como organismos que contribuyen a reproducir pero también a actualizar el orden de género de una sociedad. Lo que me ha interesado de estos programas implementados por las profesionales que trabajan en aquellos servicios, es precisamente su implicación en la transmisión cultural de la crianza, del cuidado. Un repertorio de saberes contingentes a la historia y la cultura que no solamente inciden en esquemas culturales sobre cómo criar a las y los menores, sino también sobre quién debe cuidarlos, es decir, sobre el reparto genérico de su cuidado. Por último, y como contribución angular de esta tesis, sitúo mi mirada analítica en las relaciones pedagógicas, en el proceso de transmisión-adquisición del criar. Con esta finalidad recurro a la propuesta teórica y metodológica de Basil Bernstein, más bien a una lectura feminista y de género de esta teoría, que me ayuda a analizar cómo se vehiculan los órdenes y regímenes de género, entendiendo género no como un recetario de comportamientos y actitudes, sino como una matriz de relaciones en las que los individuos se posicionan y son posicionados. Lo fundamental de esta teoría es que me obliga a fijarme, no en lo transmitido en el contexto de estas relaciones pedagógicas, sino en las reglas distributivas, las relaciones de poder y control que operan en el proceso en sí de la transmisión cultural. Mi contribución en este sentido resulta en intentar hacer observables los vértices que considera Connell en su teoría sobre el orden de género, a través del lenguaje externo de descripción propuesto por Bernstein, e integrando en todo ello la que he definido teóricamente como práctica matrona feminista. Un modelo de análisis que me permite caracterizar las modalidades pedagógicas de las matronas que he distinguido como matronas de enfoque biomédico, y de las matronas de enfoque fisiológico. Mi investigación parte de que el orden de género androcéntrico se apoya en relaciones no equitativas, estamos hablando de repartos jerárquicos del poder y el control en una sociedad dada. Poder y control son elementos clave de la teoría de Bernstein, para el autor el poder establece las relaciones legítimas entre categorías, mientras que el control regula las relaciones legítimas de comunicación. Clasificación y enmarcamiento son términos constitutivos del lenguaje de descripción creado por Bernstein para demostrar cómo se conforman, en la práctica, las relaciones de poder y control en tanto que formas pedagógicas de comunicación. Ahora bien la teoría de Bernstein acepta modulaciones en la clasificaciónn y el enmarcamiento, y son estas modulaciones las que nos permiten distinguir entre clasificaciones y enmarcamientos fuertes o débiles. La herramienta de clasificación me ha permitido definir el distanciamiento entre categorías de discursos. En este caso, entre el discurso experto y el discurso sobre la crianza; y el discurso que vincula lo femenino y lo masculino con el cuidado. El elemento de enmarcamiento me ha servido para determinar el espacio que, en este caso, las matronas profesionales ceden a las personas participantes en los procesos de comunicación. De las reglas que Bernstein identifica como reguladoras de la transmisión-adquisición, he priorizado las reglas de selección y las reglas de criterios de evaluación. Distingo tres modalidades pedagógicas diferentes que me permiten perfilar los distintos regímenes de género de los servicios de atención primaria al embarazo, parto y puerperio: Modalidad Pedagógica de Maternaje Inseguro; Modalidad Pedagógica de Maternaje Naturalizado y Modalidad de Crianza Translúcida.