Basta asomarse a los medios de comunicación para constatar la creciente atención concedida a toda una serie de problemas (contaminación pluriforme que afecta a la totalidad del planeta, cambio climático, con el incremento de fenómenos atmosféricos extremos, degradación de ecosistemas, pérdida de biodiversidad, agotamiento de recursos básicos, conflictos asociados al control de dichos recursos, etc.), que configuran una situación de auténtica emergencia planetaria, de cambio global que pone seriamente en peligro la supervivencia de la especie humana. La gravedad de dicha situación ha dado lugar a reiterados llamamientos a los educadores de cualquier área y nivel, incluyendo a los responsables de la educación "no reglada" (medios audiovisuales, prensa, museos…), para que contribuyamos a la preparación de una ciudadanía consciente de la problemática a la que se enfrenta la humanidad y que pueda participar en la toma de decisiones fundamentadas. Desde las más diversas instancias se habla hoy de la urgente necesidad de una transición a la Sostenibilidad. El objeto de este trabajo de investigación, la cual se plantea como una respuesta a este llamamiento, se centra en analizar el papel que están jugando y pueden llegar a jugar los medios audiovisuales y, más concretamente, los documentales que se difunden ampliamente a través de la TV, venta en quioscos, etc., en la formación de una ciudadanía consciente de los problemas a los que se enfrenta hoy la humanidad y preparada para participar en la adopción de las medidas necesarias. En primer lugar se analiza la atención que la enseñanza de las ciencias y la propia investigación educativa prestan al uso de los documentales, recurriendo para ello a encuestas al profesorado de ciencias en activo y en formación y a detectar y estudiar artículos dedicados a los documentales en 20 revistas de investigación e innovación en didáctica de las ciencias. Los resultados obtenidos revelan el interés del profesorado por el uso de los documentales como recurso educativo, pero su escasa utilización así como una insuficiente atención en las revistas seleccionadas. En segundo lugar hemos analizado en qué medida el contenido de estos documentales contribuye a la educación para la sostenibilidad. Dicho análisis muestra que la mayoría de los documentales ofrecen una visión fragmentaria de la actual situación de emergencia planetaria, sin mostrar la vinculación de los problemas (que se potencian mutuamente) ni abordar las medidas necesarias para hacer frente a dicha situación. No obstante hemos podido constatar también que las temáticas tratadas en la mayoría de los documentales analizados permitirían abordar funcionalmente y de forma especialmente atractiva la problemática global de la situación del mundo, sus causas y medidas que se requieren adoptar. Ello permite referirse a las perspectivas que el uso de los documentales ofrece como instrumento de educación para la sostenibilidad y a diseñar propuestas para contribuir a dicho objetivo. Finalmente, para poner a prueba que los documentales científicos pueden contribuir eficazmente en la formación de ciudadanos y ciudadanas capaces de tomar decisiones fundamentadas en torno a la situación de emergencia socioambiental planetaria, se llevan a cabo, y valoran con resultados muy prometedores, una serie de estrategias de intervención basadas en actividades que con el apoyo de los documentales cabe esperar contribuyan a despertar el interés de los estudiantes y el profesorado en formación por la problemática socioambiental y proporcionen una mejor percepción de la misma, sus causas, implicándoles en la adopción de las medidas necesarias para avanzar hacia sociedades más sostenibles.